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Entre los gastos deducibles para autónomos se encuentran los gastos de vehículos, incluyendo la posibilidad de deducir la gasolina. Sin embargo, para poder deducir la compra de un coche o el combustible es necesario cumplir ciertos requisitos.
Compra de un coche nuevo
Las personas físicas que hayan adquirido un coche nuevo podrán desgravar el IVA de dicha compra si utilizan el coche para el desarrollo de una actividad profesional.
Como compra de un vehículo se entienden las habituales de pago al contado o financiación pero también otras fórmulas, como el renting o el leasing.
La cuantía que puede desgravarse asciende al 50% de las cuotas de amortización e intereses de financiación y también la mitad del importe correspondiente al IVA.
Los profesionales que realicen determinadas actividades, como el transporte de personas o mercancías, los agentes comerciales, autoescuelas y servicios de seguridad podrán desgravarse el 100% del IVA. Para poder hacerlo, el vehículo debe estar a nombre de una persona física.
Coche de empresa
Sólo podrán desgravar el coste del coche de empresa que utilizan uno o varios empleados de una empresa las personas jurídicas. Por tanto, los autónomos quedan fuera de esta posibilidad.
Combustible
Un gasto habitual que suelen tener todos los autónomos es el combustible necesario para los desplazamientos para compras o visitas a clientes. Si se cumplen ciertos requisitos podrá deducirse en su totalidad en el IRPF y el 100% o el 50% en el IVA.
Requisitos para deducir los gastos de combustible si eres autónomo
Para deducir los gastos de combustible si eres autónomo es necesario cumplir con los siguientes requisitos:
- Registrar correctamente los gastos a deducir en los libros contables correspondientes.
- Conservar documentación justificativa de los gastos de combustible donde se vean claramente todos los importes.
- Debe existir una relación directa entre el gasto que se pretende deducir y el desarrollo de la actividad profesional por cuenta propia.
Deducción del 100% de los gastos de combustible en el IVA
El IVA de los gastos referentes a la gasolina o el gasoil podrán deducirse al 100% en los siguientes casos:
- Cuando los servicios de vigilancia se hagan con el coche del que se va a deducir el gasto de combustible.
- Si el fabricante lo utiliza para hacer demostraciones, pruebas, ensayos o promociones.
- Siempre que el vehículo sea utilizado para el transporte de personas o mercancías.
- Cuando los agentes o representantes comerciales lo utilizan para sus actos profesionales.
- Si el vehículo se utiliza para transportar a viajeros o impartir clases a conductores a cambio de una contraprestación.
Deducción del 50% de los gastos de combustible en el IVA
Cuando un autónomo no se encuentre en ninguno de los supuestos anteriores podrá deducirse el 50% del IVA del combustible siempre que la factura esté a nombre de la persona física y el vehículo se utilice para fines profesionales, aunque el vehículo no sea de su propiedad.
Deducción del combustible en el IRPF: 0% o 100%
El Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas funciona de forma muy diferente al IVA. En este caso, la Agencia Tributaria sólo permite deducir todo el importe tanto en la compra del vehículo como en el combustible.
Para poder desgravar el 100% de estas cuantías es necesario demostrar que se ha usado de forma exclusiva para la actividad. Probar que no se ha hecho uso en el ámbito personal del vehículo es muy complicado por lo que es recomendable no desgravar en el IRPF ningún importe relacionado con el vehículo o el combustible si no se realiza una actividad vinculada al transporte, como los taxis, repartidores o profesores de autoescuela. En el caso de estas actividades podrán deducirse todo gasto relacionado con el vehículo que usan para desarrollarla.
Justificación de los gastos de combustible
Como cualquier gasto relacionado con la actividad económica, los gastos de combustible es necesario justificarlos para poder desgravarlos.
Si se tiene la factura y se encuentra correctamente registrada el proceso será sencillo pero, en caso contrario, la cuestión es bastante más compleja. Para justificar estos gastos existen algunas pruebas que pueden presentarse en caso de que no exista factura:
- Audios con información relevante.
- Transferencias bancarias a surtidores o dispensadores de combustible.
- Mensajes de texto o a través de aplicaciones como WhatsApp.
- Fotografías que muestren información relacionada.
- Tickets de parking donde se refleje la matrícula del vehículo.
- Registros de kilómetros.
- Presupuestos enviados a los clientes.
- Agendas con citas de visitas.
Como hemos visto, los gastos de vehículos deducibles para autónomos son principalmente la compra de un coche nuevo y el combustible necesario para los desplazamientos realizados durante la actividad económica. En el caso del IVA, se podrán deducir tanto la adquisición del vehículo como el gasto en carburante al 50% o al 100% en función de la actividad que se realice. En el IRPF sólo podrán desgravarse el importe total los autónomos que realicen actividades relacionadas directamente con el transporte.
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