Los autónomos suelen quejarse en muchas ocasiones de que la presión fiscal que reciben es demasiado alta.
Uno de los impuestos que más afecta a los trabajadores por cuenta propia es el IRPF. Pero… ¿están siempre obligados a presentar la declaración de la renta? ¿Cuándo y cómo?
Vamos a verlo todo.
¿Qué es la declaración de la renta de autónomos?
La declaración de la renta forma parte del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y en ella se incluyen todos los rendimientos que han obtenido las personas físicas, por tanto también los autónomos, durante un ejercicio. Se desglosan ingresos, gastos e inversiones correspondientes al año natural.
De la declaración del IRPF se extraen todos los datos relacionados con los rendimientos del contribuyente, más aún si es un profesional por cuenta propia.
Con esta declaración se regulariza la situación fiscal y se informa a Hacienda de los beneficios obtenidos, de forma detallada y desglosada, calculando la diferencia entre las ganancias y los gastos.
Para calcular los ingresos se tienen en cuenta tanto las rentas del trabajo como las que se hayan obtenido por otros conceptos, como las ganancias patrimoniales.
En cuanto a los gastos presentados en la declaración, estos también pueden contemplar las posibles pérdidas de capital que puedan generarse con la venta de bienes o inmuebles.
¿Para qué sirve la declaración de la renta?
La Declaración de la Renta tiene como finalidad liquidar el impuesto e informar a la Agencia Tributaria de los rendimientos que se han generado durante el ejercicio que corresponde con el año natural.
La información que se incluye en esta declaración se utiliza por parte de Hacienda para calcular la cantidad que tiene que pagar el autónomo en concepto de IRPF. Este se calcula a partir de los beneficios obtenidos y para conocerlos resulta imprescindible elaborar y documentar correctamente la declaración.
Los autónomos tienen una situación algo distinta pues en ocasiones aplican retenciones en las facturas. Así, adelantan en cada factura o trimestralmente la cantidad de dinero que tiene que pagar para el IRPF.
Cuando la Agencia Tributaria hace el cálculo del IRPF, el autónomo deberá pagar si ha adelantado menos dinero o solicitar la devolución cuando las cantidades adelantadas son superiores al importe definitivo.
¿Quiénes están obligados a hacer la Declaración de la Renta?
Hasta la entrada en vigor de la cotización para los autónomos en función de los ingresos, había unos límites para declarar en función de lo que hubiera ingresado.
Sin embargo, actualmente todos los autónomos que hayan estado dados de alta en el RETA en algún momento en el año 2023 tendrán que realizar la declaración de la renta de forma obligatoria en 2024.
Por tanto, si eres autónomo, tendrás que presentar la Declaración de la Renta.
Plazos para la presentación de la Declaración de la Renta de autónomos
Como el resto de obligaciones relacionadas con la Agencia Tributaria, existen unos plazos para presentar la Declaración de la Renta.
Este año 2024 se liquida el ejercicio 2023 y el plazo de presentación se abre a partir del 3 de abril. A partir de ese día se puede rellenar y enviar el documento.
En cuanto al plazo de finalización, hay dos diferentes. El 26 de junio se acaba el periodo para quienes han elegido el pago por domiciliación bancaria y el 1 de Julio, debido a que el 30 de junio es domingo, finaliza para los que han optado por otro sistema.
Formas de presentación de la Declaración de la Renta de autónomos
El autónomo tiene tres formas de presentar la Declaración de la Renta:
- Vía telemática. A través de internet. Es la más cómoda y utilizada desde hace unos años.
- Vía telefónica. Se pueden consultar las dudas con un asesor especializado.
- Vía presencial. Acudiendo a una oficina con cita previa y toda la documentación necesaria.
Es importante tener claro que, aunque la declaración se presente con ayuda de la Agencia Tributaria, tanto por teléfono como en oficina física, están eximidos de responsabilidad. Esto quiere decir que cualquier error es tuyo y te podrán sancionar por ello.
Otra opción es contar con asesores fiscales y tributarios que se encarguen de aconsejarte, elaborar y presentar la Declaración de la Renta y el resto de impuestos de autónomo. Así estarás más seguro de que todo está correcto y no recibirás ninguna sorpresa. El Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas es el principal tributo que se aplica a los trabajadores autónomos. Se presenta de forma anual aunque ellos adelantan en factura o trimestralmente una cuantía. Cuando se envía la declaración el resultado puede ser a pagar o a devolver, en función de lo que deba pagar y lo que haya adelantado. Existe un plazo establecido cada año y tres vías para presentarla: telemática, telefónica o presencial.
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